Índice
Qué es el lupus
El lupus es una enfermedad autoinmune sistémica que ocurre cuando el sistema inmunológico ataca los tejidos y órganos del cuerpo. La inflamación que causa puede afectar diferentes sistemas del organismo. Entre las zonas que afecta esta enfermedad están: articulaciones, piel, riñones, células sanguíneas, cerebro, corazón y pulmones.
Cuando funciona de manera adecuada, el sistema inmunológico elabora proteínas llamadas anticuerpos. El objetivo de estas es proteger y luchar contra antígenos como virus y bacterias. El lupus hace que dicho sistema no sea capaz de diferenciar entre los antígenos y el tejido sano. Los antígenos son sustancias capaces de inducir una respuesta inmune específica. Esto conduce al sistema inmunológico a dirigir los anticuerpos hacia el tejido sano (no solo a los antígenos). Esta reacción provoca inflamación, dolor y daño a los tejidos.
Diagnosticar el lupus puede ser un desafío, ya que los síntomas en ocasiones pueden imitar a otras enfermedades. La señal más distintiva es un sarpullido facial que puede ocurrir en la mayoría de los casos , pero no en todos. Algunas personas nacen con una tendencia para desarrollar esta enfermedad, la cual puede desencadenarse por infecciones, ciertos medicamentos o incluso la luz solar. Aunque no hay cura para la condición, los tratamientos ayudan a controlar los síntomas.
Tipos de lupus
Hay muchos tipos diferentes de lupus, incluidas las siguientes cinco formas:
- Lupus eritematoso sistémico (LES): cuando la gente habla sobre el lupus, casi siempre se refieren a este tipo. “Sistémico” significa que la enfermedad puede afectar numerosas partes del cuerpo. Los síntomas del LES pueden ser leves o graves, y aunque es más común en personas de entre 15 y 45 años, también puede ocurrir durante la niñez o más adelante en la vida.
- Lupus eritematoso discoide (LED): el LED es un trastorno crónico de la piel en el que aparece un sarpullido rojo en la cara, el cuero cabelludo o cualquier otra parte del cuerpo. Las áreas elevadas pueden volverse gruesas y escamosas, y causar cicatrices. La erupción puede durar días o años y puede volver. Pocas personas con DLE tienen o desarrollar LES.
- Lupus cutáneo: este causa sarpullido o lesiones en la piel, usualmente cuando se expone a la luz solar.
- Lupus inducido por medicamentos: es similar al LES, aunque este es causado por una reacción exagerada a medicamentos. Los síntomas usualmente desaparecen una vez que se deja de administrar el medicamento que los causó.
- Lupus neonatal: ocurre cuando un bebé adquiere autoanticuerpos de su madre con LES. Los problemas de la piel, hígado y sangre se resuelven dentro de los primeros seis meses. Sin embargo, los problemas más serios, como el bloqueo cardiaco congénito, requieren un marcapasos.
Causas de lupus
Esta condición ocurre cuando el sistema inmunológico ataca el tejido saludable. Probablemente sea resultado de una combinación de factores genéticos y ambientales. Al parecer las personas con una predisposición hereditaria pueden desarrollar la enfermedad al tener contacto con algo en el ambiente que la desencadene. La causa en la mayoría de los casos es desconocida. Algunos de los desencadenantes potenciales incluyen:
- Luz solar: la exposición al Sol puede provocar lesiones en la piel y desencadenar una respuesta interna en gente susceptible.
- Infecciones: una infección puede comenzar con la enfermedad o causar una recaída en algunas personas.
- Medicamentos: la condición puede ser desencadenada por ciertos tipos de medicamentos para la presión, anticonvulsivos y antibióticos. El lupus inducido por medicamentos suele desaparecer cuando se deja de tomarlos. Con poca frecuencia los síntomas pueden persistir después de detener la administración de dichos medicamentos.
Factores de riesgo de lupus
Los siguientes factores pueden incrementar el riesgo de desarrollar la enfermedad:
- Género: esta enfermedad es más común en mujeres
- Edad: a pesar de que el lupus afecta a personas de todas las edades, el diagnóstico es más común entre 15 y 45 años
- Etnicidad: esta enfermedad es más frecuente en afroamericanos, hispanos y asiáticoamericanos
Síntomas de lupus
El lupus es una enfermedad que se puede presentar en diferentes facetas. Raramente, las personas tienen los mismos síntomas, ya que uno o varios pueden variar. A pesar de que hay diversas manifestaciones posibles de la enfermedad, las que mencionaremos son los más comunes.
Una persona con la condición puede tener cuatro o más síntomas. Algunos de estos pueden disminuir y otros desarrollarse:
- Dolor de articulaciones
- Dolor de músculos
- Fatiga extrema
- Debilidad
- Sarpullido permanente en las mejillas
- Riesgo mayor de aborto espontáneo
- Sarpullido por luz solar (rayos UV)
- Síntomas parecidos a la gripe y sudoración nocturna
- Pérdida o aumento de peso sin razón aparente
- Inflamación de los tejidos que cubren los órganos internos con dolor en el pecho o abdomen
- Convulsiones u otros problemas en el cerebro
- Dolor de cabeza o migraña
- Problemas renales
- Úlceras nasales y orales
- Pérdida de cabello
- Depresión
- Desórdenes hematológicos, incluida anemia
- Glándulas hinchadas
Diagnóstico de lupus
El diagnóstico de la enfermedad es difícil debido a que los síntomas y señales varían considerablemente de persona a persona. Además, pueden cambiar con el tiempo y combinarse con los de otras enfermedades. No existe una prueba que por sí sola pueda diagnosticar esta enfermedad. La combinación de varios análisis clínicos, de sangre y orina, así como la examinación física y clínica (síntomas) puede conducir al diagnóstico.
Pruebas de laboratorio
Las pruebas de sangre y orina incluyen:
Biometría hemática: esta prueba mide el número de glóbulos rojos, blancos y plaquetas, así como la cantidad de hemoglobina. Los resultados pueden indicar anemia, que ocurre comúnmente en el lupus. Un bajo conteo de glóbulos rojos o plaquetas también ocurre en esta condición.
Tasa de sedimentación eritrocítica: esta prueba de sangre determina la rapidez con la que los glóbulos rojos se asientan en el fondo de un tubo en una hora. Una tasa más rápida de lo normal puede indicar una enfermedad sistémica como esta. La tasa de sedimentación no es específica para cualquier enfermedad. Esta puede ser elevada en caso de lupus, infección, otra condición inflamatoria o cáncer.
Evaluación renal y hepática: las pruebas de sangre pueden evaluar qué tan bien están funcionando los riñones y el hígado. El lupus puede afectarlos.
Análisis de orina: una examinación de una muestra de orina puede revelar un incremento en los niveles de proteína o glóbulos rojos en la orina. Esto ocurre cuando los riñones sufren daño por esta condición.
Prueba de anticuerpos antinucleares (ANA): una prueba positiva de la presencia de estos anticuerpos indica un sistema inmunológico estimulado. Mientras que la mayoría de las personas con lupus tiene una prueba positiva de ANA, otra gran parte de personas con resultados positivos no padecen la enfermedad. En caso de que una persona tenga resultados positivos, el doctor puede solicitar un examen de anticuerpos más específicos.
Pruebas de imagen
Si el doctor sospecha que el lupus afecta los pulmones o el corazón, puede sugerir las siguientes pruebas:
Radiografía del pecho: una imagen del pecho puede revelar sombras anormales que sugieren fluidos o inflamación en los pulmones.
Ecocardiograma: esta prueba usa ondas sonoras que producen imágenes en tiempo real del latido cardiaco. Aquí se revisa los problemas con las válvulas y otras zonas del corazón.
Biopsia
El lupus puede dañar los riñones de diferentes maneras. Los tratamientos pueden variar, dependiendo del tipo de daño. En algunos casos es necesario tomar una pequeña muestra de tejido renal para determinar el mejor tratamiento. La muestra se obtiene con una aguja o a través de una pequeña incisión.
La biopsia de piel en ocasiones se realiza para confirmar el diagnóstico de lupus que afecta la piel.
Tratamiento del lupus
En la actualidad, los médicos cuentan con más opciones para ayudar a los pacientes a controlar el lupus de manera efectiva. El alcance y la efectividad de los tratamientos se han incrementado en las últimas décadas. Los tratamientos y medicamentos actuales incluyen:
Medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE)
Los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos disminuyen la inflamación. A menudo se usan para tratar a personas con dolor en las articulaciones o en el pecho, fiebre e hinchazón. Algunos AINE, como el ibuprofeno y el naproxeno, están disponibles sin receta. Otros sí requieren receta médica. Se puede usar solos o en combinación con otros medicamentos bajo supervisión médica.
Medicamentos contra la malaria
Los medicamentos contra la malaria o antipalúdicos previenen y tratan la malaria, pero también son útiles para el lupus. Un antipalúdico común es la hidroxicloroquina. Se puede usar solo o en combinación con otros medicamentos para tratar la fatiga, el dolor articular, las erupciones cutáneas y la inflamación pulmonar. Los estudios clínicos han encontrado que el uso regular de antimaláricos puede evitar que reaparezcan las erupciones.
Medicamentos corticosteroides
Los medicamentos corticosteroides son una familia de medicamentos relacionados con el cortisol, una hormona antiinflamatoria natural. Estos reprimen rápidamente la inflamación. Sin embargo, los corticosteroides son medicamentos potentes con efectos secundarios. Los médicos buscarán la dosis más bajas para lograr el beneficio deseado o los usarán en combinación con medicamentos menos potentes.
Inmunosupresores
Si los riñones o el sistema nervioso central se ven afectados por el lupus, es posible necesitar una terapia inmunosupresora. Esta restringe al sistema inmunológico hiperactivo mediante el bloqueo de la producción de células inmunes. Los posibles efectos secundarios pueden incluir un mayor riesgo de infección, daño hepático, disminución de la fertilidad y cáncer. El riesgo de efectos secundarios aumenta con la duración del tratamiento.
Inhibidores de la proteína estimuladora de linfocitos B
En 2011, la Administración de Alimentos y Medicamentos aprobó belimumab, un inhibidor de la proteína estimuladora de linfocitos B, para pacientes con lupus que reciben otras terapias. Es posible que el belimumab reduzca el número de células B anormales que se cree que son un problema en el lupus. Este inhibidor se aprobó como una fórmula autoinyectable (subcutánea) para personas con LES que reciben tratamiento tradicional. La nueva formulación permite a los pacientes administrarse el medicamento como una inyección semanal.
Además de los tratamientos para el lupus, los pacientes también pueden tomar medicamentos adicionales. Esto para tratar problemas relacionados con la enfermedad, como colesterol alto, presión arterial alta o infección.
Recomendaciones para el lupus
Las medidas simples pueden ayudar a prevenir los brotes y, en caso de que ocurran, a aliviar los síntomas. Es recomendable hacer caso a las siguientes sugerencias:
Consultar al médico con regularidad: debe programarse revisiones regulares en vez de consultar al médico cuando los síntomas empeoran. Esto puede ayudar a prevenir ataques y a abordar preocupaciones de rutina, como estrés, dieta y ejercicio, ya que pueden ser útiles para prevenir complicaciones.
No exponerse mucho tiempo a la luz solar: esto debido a que la luz ultravioleta puede desencadenar un brote. Se recomienda usar ropa protectora, como un sombrero, camisa de manga larga y pantalones largos; además de protectores solares con un factor de protección (FPS) de al menos 55.
Ejercicio: puede ayudar a mantener los huesos fuertes, reducir el riesgo de ataque cardiaco, además de promover el bienestar general.
Dejar de fumar: fumar aumenta el riesgo de enfermedad cardiovascular y puede empeorar los efectos del lupus en el corazón y vasos sanguíneos.
Tener una dieta saludable: es importante apoyarse en las frutas, verduras y granos integrales. A veces se puede tener restricciones dietéticas, especialmente si tiene presión arterial alta, daño renal o problemas gastrointestinales.
Es deseable preguntar al médico si se necesita suplementos de vitamina D y calcio. Existe evidencia que sugiere que las personas con esta enfermedad pueden beneficiarse con suplementos de vitamina D. Un suplemento de calcio de 1,200 a 1,500 miligramos tomado diariamente puede ayudar a mantener sus huesos sanos.
Tu opinión es importante
Nuestro objetivo en Meditip es informarte y ayudarte a tomar las mejores decisiones acerca de lo más valioso que tienes, tu salud y la de tus seres queridos. Hacemos un gran esfuerzo por presentar información de manera sencilla y fácil de entender. Ayúdanos a saber si estamos haciendo bien nuestro trabajo. Califica nuestro artículo y/o deja un breve comentario.
Fuentes
Lupus Research Alliance. (2017). About Lupus. 23 de abril de 2018, de Lupus Research Alliance Sitio web: https://www.lupusresearch.org/understanding-lupus/what-is-lupus/about-lupus/
Mayo Clinic Staff. (2017). Lupus. 23 de abril de 2018, de Mayo Clinic Sitio web: https://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/lupus/symptoms-causes/syc-20365789
Heather Lindsey. (2017). Lupus: Everything You Need to Know About the Disease, What Causes It, and How to Treat It. 23 de abril de 2018, de Everyday Health Sitio web: https://www.everydayhealth.com/lupus/
The MNT Editorial Team. (2017). Lupus: Causes, symptoms, and research. 23 de abril de 2018, de Medical News Today Sitio web: https://www.medicalnewstoday.com/info/lupus
Geraldine Leonard. (2015). What is lupus?. 23 de abril de 2018, de Independent – Lupus UK Sitio web: https://www.independent.co.uk/life-style/health-and-families/what-is-lupus-what-are-the-symptoms-and-is-treatment-readily-available-a6686246.html
1 comentario
Muchas gracias aquí encontré información importante de la enfermedad lupus mi esposo la padece desde pequeño y no le ha presentado mucha atención hasta ahora que se a complicado le pica mucho y sangra de tanto rascarse me preocupa en lo que pueda convertirse.