Menopausia: causas, síntomas y tratamiento

Qué es la menopausia

La menopausia es un proceso biológico que marca el fin definitivo de la menstruación. El diagnóstico se confirma al pasar 12 meses continuos sin periodos menstruales y puede ocurrir entre los 40 y 55 años. Los síntomas físicos, como los bochornos, y los síntomas emocionales pueden trastornar el sueño, disminuir la energía o afectar la salud emocional. Existen muchos tratamientos efectivos que incluyen cambios en el estilo de vida y terapia hormonal.

La edad promedio para la menopausia es de 51 años. En mujeres afroamericanas y latinas, puede ocurrir en promedio dos años antes. Aún hacen falta estudios para comprender el inicio de la condición en otras mujeres no caucásicas (no blancas).

Existen algunos factores que pueden ayudar a determinar cuándo comenzará la menopausia, incluyendo genética y salud ovárica en general. La etapa justo anterior recibe el nombre de perimenopausia. El prefjo peri proviene del griego y signfica “alrededor”. Es el momento en el que las hormonas comienzan a cambiar en preparación para la menopausia. Esta puede durar desde unos meses hasta varios años. Algunas mujeres comienzan con la perimenopausia en algún punto después de los 45 años. Otras pueden saltarse esto y entrar en la menopausia directamente.

Aproximadamente el 1% de las mujeres experimenta la menopausia antes de los 40. Cerca del 5% la experimenta entre los 40 y 45 años. A esto se le conoce como menopausia prematura o insuficiencia ovárica primaria.

Causas de la menopausia

Algunas condiciones médicas y quirúrgicas pueden hacer que la menopausia se presente de manera anticipada.

Declive natural de hormonas reproductivas

Al acercarse a los 40 años, los ovarios comienzan a producir menos estrógeno y progesterona. Estas son las hormonas que regulan la menstruación. A este declive lo acompaña una disminución de la fertilidad. A partir de los 40 años, los periodos menstruales se vuelven más largos o cortos, más pesados o ligeros, y más o menos frecuentes. Esto hasta que finalmente, cerca de los 51 años, los ovarios dejan de producir ovarios y no hay más menstruación.

Histerectomía

La histerectomía es una cirugía en la que se retira el útero (la matriz). En ocasiones se retira también el cuello del útero, los ovarios, las trompas de falopio y otras estructuras de la zona. Una histerectomía que retira el útero, pero no los ovarios, usualmente no causa menopausia inmediata. Aunque no haya menstruación, los ovarios siguen liberando óvulos y produciendo estrógeno y progesterona. Sin embargo, la histerectomía total y la ooforectomía bilateral (extirpación de útero y ovarios) causa menopausia inmediata. Los períodos desaparecen y se pueden experimentar bochornos y otros síntomas menopáusicos. Estos pueden ser severos, ya que los cambios hormonales ocurren abruptamente y no de forma gradual.

Quimioterapia y terapia de radiación

Las terapias contra el cáncer pueden provocar la menopausia causando síntomas como bochornos durante o poco después del tratamiento. La interrupción de la menstruación y fertilidad no siempre es permanente después de la quimioterapia. Las medidas para el control de la natalidad (métodos anticonceptivos) pueden ser necesarios.

Insuficiencia ovárica primaria

Alrededor del 1% de las mujeres experimentan menopausia antes de los 40 (menopausia prematura). Esto puede ser resultado de la insuficiencia ovárica primaria. Ocurre cuando los ovarios no producen los niveles normales de hormonas reproductivas, debido a enfermedades autoinmunes o factores genéticos. A menudo la causa no puede determinarse. Para esas mujeres, la terapia hormonal es una alternativa, con la indicación y supervisión médicas adecaudas. La terapia continúa al menos hasta la edad natural de la menopausia. El motivo principal es proteger el cerebro, el corazón y los huesos.

Síntomas de la menopausia

La mayoría de las mujeres experimentan algunos síntomas alrededor de la menopausia. La duración y severidad de estos varían de mujer a mujer. Usualmente comienzan meses o años antes de que la menstruación se detenga (perimenopausia) y persisten tiempo después. En promedio, la mayoría de los síntomas duran alrededor de cuatro años después del último periodo. Sin embargo, algo así como una de cada 10 mujeres los experimentan hasta por 12 años.

Si una mujer experimenta menopausia repentina en vez de gradual, debido a alguna de las causas señaladas arriba, los síntomas pueden ser peores.

Cambio en los periodos

La primera señal de menopausia es el cambio en el patrón normal de la menstruación. Esto quiere decir que se puede tener períodos más ligeros o más abundantes de lo normal. La frecuencia también puede cambiar. Los períodos menstruales pueden ocurrir cada dos o tres semanas, o no tener durante meses. Eventualmente, la menstruación se detendrá.

Síntomas comunes de la menopausia

Aproximadamente ocho de cada 10 mujeres tendrán síntomas adicionales durante algún tiempo antes y después de que se detengan sus periodos. Estos síntomas pueden tener un impacto significativo en la vida diaria de algunas mujeres, incluyendo:

• Bochornos: sensaciones cortas y repentinas de calor, usualmente en la parte superior del cuerpo
• Sudoración nocturna: bochornos que ocurren por la noche
• Dificultad para dormir: lo que puede provocar sensación de cansancio o irritabilidad durante el día
• Reducción de la libido: disminución del deseo sexual
• Problemas de concentración y memoria: condiciones que usualmente son pasajeras
• Resequedad vaginal y dolor, comezón o incomodidad durante el sexo
• Dolor de cabeza
• Cambios de ánimo, como ansiedad o sensación de estar decaída
• Palpitaciones: latidos cardiacos repentinos que se vuelven más notables
• Rigidez y dolor en las articulaciones
• Reducción de la masa muscular
• Infecciones en las vías urinarias recurrentes, como cistitis

La menopausia también puede incrementar el riesgo de desarrollar otros problemas, como el debilitamiento de huesos y osteoporosis. Es necesario hacer los exámenes adecuados, pues la osteoporosis tiene más causas que la menopausia y la menopausia no siempre provoca osteoporosis.

Complicaciones de la menopausia

• Atrofia vulvovaginal
• Relaciones sexuales dolorosas
• Función metabólica lenta
• Osteoporosis
• Cataratas
• Enfermedad periodontal
• Vejiga hiperactiva (incontinencia urinaria)
• Enfermedad cardiaca o de los vasos sanguíneos
• Sobrepeso

Diversas complicaciones pueden surgir de confundir alguna enfermedad con la menopausia y sus síntomas. No podemos decir que se trata de complicaciones de la menopausia. Se trata más bien de complicaciones de un diagnóstico incorrecto. Por lo anterior, es importante conocer los síntomas y consultar al médico en caso de que algo sea más severo o no exactamente como debería.

La menopausia y la glándula tiroides

Es importante distinguir los síntomas de la menopausia de los síntomas de enfermedades de la glándula tiroides. Las enfermedades tiroideas son comunes en mujeres y algunas de ellas son más frecuentes a partir de los 50 años. El diagnóstico inicial de estas condiciones es una prueba de sangre llamada perfil tiroideo. En caso de tener síntomas de hipertiroidismo o hipotiroidismo, es necesario acudir con un profesional, pues confundir las condiciones puede acarrear complicaciones.

Algunos síntomas del hipertiroidismo que pueden simular los de la transición a la menopausia incluyen bochornos, intolerancia al calor, palpitaciones (episodios cortos de latidos cardíacos rápidos), taquicardia (latidos cardíacos rápidos persistentes) e insomnio.

Algunos síntomas del hipotiroidismo son similares a los síntomas de la transición a la menopausia. Estos incluyen fatiga, olvido, cambios de humor, aumento de peso, ciclos menstruales irregulares e intolerancia al frío.

Diagnóstico de la menopausia

Las señales y síntomas de esta condición son usualmente suficientes para indicar a una mujer la transición hacia la menopausia. Si la preocupación llega al notar periodos irregulares o bochornos, es importante acudir con el médico. La evaluación temprana es recomendable.

Las pruebas, por lo general, no son necesarias para diagnosticar menopausia. Pero en ciertas circunstancias, el doctor recomendará pruebas de sangre para revisar los siguientes parámetros:

• Hormona estimulante del folículo (FSH) y estrógeno (estradiol), esto porque los niveles de FSH incrementan y los niveles de estradiol disminuye al ocurrir la menopausia.
• Hormona estimulante de la tiroides (TSH), esto porque los síntomas de las enfermedades tiroides pueden ser similares a la menopausia.

Existen pruebas caseras de venta libre para revisar los niveles de FSH en la orina. Las pruebas pueden indicar si los niveles son elevados y si una mujer está en perimenopausia o menopausia. Sin embargo, desde que los niveles de FSH se elevan y disminuyen durante el curso de la menstruación, estas pruebas caseras no son del todo confiables para el diagnóstico.

Otros análisis clínicos como la química sanguínea y la biometría hemática pueden dar información relevante para el diagnóstico y tratamiento.

Tratamiento para la menopausia

La menopausia no requiere tratamiento médico. En vez de eso, el tratamiento se enfoca en mejorar los síntomas y prevenir o controlar condiciones crónicas que puedan ocurrir con la edad.

El tratamiento incluye:

Terapia hormonal: la terapia de estrógeno es la opción más efectiva de tratamiento para aliviar bochornos menopáusicos. Dependiendo del historial médico familiar y personal, el médico recomendará estrógeno en la dosis más pequeñas por el período más corto necesario para aliviar los síntomas. En caso de no haber tenido una histerectomía, se puede necesitar progestina además de estrógeno. El estrógeno también ayuda a prevenir la pérdida ósea. El uso prolongado de terapia hormonal puede tener algunos riesgos cardiovasculares y de cáncer de mama. Empezar la terapia cerca del tiempo de la menopausia puede ser beneficioso para algunas mujeres.

Remedios para los síntomas de la menopausia

Estrógeno vaginal: para aliviar la resequedad, el estrógeno puede aplicarse directamente en la vagina como crema especial, tableta o anillo. Este tratamiento libera una cantidad pequeña de estrógeno que los tejidos vaginales absorben. Ayuda a aliviar la resequedad vaginal, incomodidad en las relaciones sexuales y algunos síntomas urinarios.

Gabapentina: este medicamento es aprobado para tratar convulsiones, pero también para reducir los bochornos. Es útil en mujeres que no pueden usar terapia de estrógeno y en aquellas que tienen sudoración nocturna.

Clonidina: es una píldora o parche usado comúnmente para tratar la presión alta. Puede proveer cierta mejora para los bochornos.

Medicamentos para prevenir o tratar la osteoporosis: según las necesidades de cada persona, el médico puede recomendar esto. Existen muchos medicamentos para reducir la pérdida ósea y el riesgo de fracturas. El doctor también puede prescribir suplementos de vitamina D para ayudar a fortalecer los huesos.

Antes de decidir cualquier forma de tratamiento, el médico debe informar acerca de las opciones, riesgos y beneficios.

Recomendaciones para la menopausia

Por fortuna, muchos de los síntomas asociados con la condición son temporales. Las siguientes recomendaciones pueden ayudar a reducir o prevenir sus efectos:

Aliviar los bochornos: algunas recomendaciones para esto son vestirse de forma ligera, tomar vasos fríos de agua o estar en algún lugar frío. Es importante tratar de identificar qué desencadena los bochornos. En algunas mujeres, los desencadenantes son bebidas calientes, cafeína, comidas picantes, alcohol, estrés, clima cálido e incluso una habitación calurosa.

Disminuir la incomodidad vaginal: se puede usar lubricantes vaginales a base de agua, de silicón o humectantes. Se recomienda no usar aquellos que contengan glicerina, pues pueden irritar o causar ardor. Estar sexualmente activa ayuda a incrementar el flujo sanguíneo a la vagina.

Dormir lo suficiente: evitar o disminuir la cafeína puede ayudar, ya que dificulta el sueño. Asimismo, evitar el exceso de alcohol y no hacer ejercicio poco antes de ir a dormir puede ayudar..

Practicar técnicas de relajación: algunas técnicas como la respiración profunda y controlada, los masajes y la relajación muscular pueden ayudar con los síntomas.

Fortalecer el piso pélvico: los ejercicios para los músculos del piso pélvico o ejercicios de Kegel ayudan a mejor algunas formas de incontinencia urinaria.

Tener una dieta balanceada: esto incluye una variedad de frutas, vegetales y granos enteros, así como limitar grasas saturadas, aceites y azúcar. El doctor puede recomendar calcio o suplemen

tos de vitamina D para ayudar a hacer las tareas diarias.

Dejar de fumar: fumar incrementa el riesgo de enfermedad cardiaca, paro cardiaco, osteoporosis, cáncer y otros problemas de salud. Además, incrementa los bochornos y la menopausia temprana.

Ejercitarse regularmente: tener actividad física regular ayuda a protegerse contra enfermedades cardiacas, diabetes, osteoporosis y otras condiciones asociadas con la edad.

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Fuentes

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